institucionales para alcanzar los objetivos de la política forestal nacional.
• Focalización de recursos, simplificación de reglas de operación de ProÁrbol y mayor coordinación interinstitucional, son algunas de las estrategias enunciadas por el Director General de esta institución
La Comisión Nacional Forestal y el programa ProÁrbol se encuentran en un proceso de revisión y mejora para lograr el logro de los objetivos de la política forestal del país, expresó hoy el Director General de esta institución, Juan Manuel Torres Rojo.
En el evento inaugural de Expo Forestal 2009, el funcionario federal indicó que se requieren voluntades para asumir retos que logren incrementar la superficie bajo manejo forestal sustentable, que ayuden a recuperar amplias zonas degradadas y que aseguren la conservación y protección de los ecosistemas nacionales.
” Estos retos requieren de políticas públicas eficientes y bien direccionadas, en lo cual está trabajando la Comisión Nacional Forestal”, aseguró. “No obstante”, dijo, “la aplicación y monitoreo de resultados requieren del trabajo y compromiso compartido de todos los agentes dentro del sector”.
Luego de reconocer que el programa ProÁrbol ha tenido logros y desencuentros, y que aún existen muchas cosas por hacer, Torres Rojo señaló que ningún recurso podría satisfacer en su totalidad las necesidades de un sector que por muchos años no recibió la importancia que representa, como elemento coadyuvante, al bienestar social y ambiental nacional, para este año 2009 y los años subsecuentes, estaremos dando un giro importante al programa.
Por todo lo anterior, describió las estrategias que desarrollará la Conafor para mejorar su operación.
Este escenario, a través de sus seis ediciones anteriores, ha fortalecido la presencia del sector forestal, generando nuevos enfoques y estrategias para elevar de manera integral la competitividad de la actividad en el país. De igual manera, ha constituido una plataforma para el desarrollo económico en amplias zonas del país, que al mismo tiempo garantiza la conservación y fomento de los recursos forestales.
En un país como México, en donde 73 por ciento de su superficie es eminentemente forestal, se requieren voluntades para asumir retos que logren incrementar la superficie bajo manejo forestal sustentable, que ayuden a recuperar amplias zonas degradadas y que aseguren la conservación y protección de nuestros ecosistemas. Estos retos requieren de políticas públicas eficientes y bien direccionadas.
En ellas y en su mejora continua, trabajamos en la CONAFOR.
No obstante, la aplicación y monitoreo de resultados requieren del trabajo y compromiso compartido de todos los agentes dentro del sector.
ProÁrbol se ha consolidado como una estrategia del Gobierno Federal para canalizar e invertir recursos económicos en las zonas forestales. El programa ha venido desarrollando mayores y mejores oportunidades para los dueños y poseedores de los terrenos forestales, promoviendo el desarrollo comunitario y fortaleciendo las cadenas productivas, y a la par, atendiendo acciones de conservación y restauración en miles y miles de hectáreas que han sufrido un fuerte grado de alteración.
ProÁrbol representa un apoyo directo a la gente, un esquema que lleva inversión a las zonas de más alta marginación, usualmente ubicadas en zonas de bosques y selvas, donde precisamente existe la mayor pobreza del país. Es así que ProÁrbol cumple con un objetivo dual: asegurar la conservación y protección de nuestros recursos forestales y mejorar el nivel de vida de la población.
Desde su presentación en 2007, el programa ha tenido logros y desencuentros, siendo sin lugar a duda, mayores sus logros.
Reconocemos que existen muchas cosas por hacer, y en ello estamos trabajando. Conscientes de que ningún recurso podría satisfacer al 100 por ciento las necesidades de un sector que por muchos años no recibió la importancia que representa, como elemento coadyuvante, al bienestar social y ambiental nacional, para este año 2009 y los años subsecuentes, estaremos dando un giro importante al programa.
Primero haremos un notable esfuerzo por mejorar la focalización de recursos, que permitan concentrar acciones en aquellas áreas de atención prioritaria y estratégica, tanto en el aspecto de conservación como de producción, considerando condiciones climáticas y potencialidades del país.
Este nuevo enfoque permitirá priorizar en áreas compactas que adicionalmente actúen como polos de desarrollo de la actividad y tengan un mayor impacto en la restauración y conservación del ecosistema.
Un segundo esfuerzo será diferenciar los apoyos, de tal forma que se generen incentivos para actividades de conservación o restauración adicionales e incluso pagar por el costo de oportunidad de reestablecer un uso de suelo forestal.
Para ello, se requiere migrar del programa tradicional de reforestación aislado de un programa de pago por servicios ambientales o de uno de desarrollo forestal, hacia una estrategia de proyectos integrales, con apoyos diferenciados, en áreas compactas por cuencas hidrográficas específicas y con trabajo cercano a los gobiernos locales; un ejemplo de la estrategia son los trabajos que estamos llevando a cabo en las cuencas del Sistema Cutzamala.
Priorizaremos el enfoque en la supervivencia en el largo plazo, reforzando las tareas de protección, mantenimiento y supervisión permanente de las áreas reforestadas.
Mediante una revisión amplia y consensuada con todos los actores, trabajaremos en la simplificación de las Reglas de Operación, haciéndolas más accesibles para los beneficiarios, con un seguimiento más puntual y transparente en todo su proceso. Debemos avanzar en el mejoramiento del sistema de verificación y monitoreo del cumplimiento de los compromisos derivados de los apoyos, así como los impactos de los mismos.
Pondremos en práctica una intensa coordinación institucional, con todas las dependencias (CONANP, PROFEPA, INE, CONAGUA, SAGARPA, SEDESOL, SEDENA SEMAR , SCT, ETC.) y niveles de gobierno, para mejorar la eficiencia y concurrencia de todos los programas forestales.
La CONAFOR se encuentra en un proceso de revisión, ajuste y mejora de sus procesos en toda su estructura. De acuerdo con el programa de austeridad de la administración federal, vigilaremos la correcta aplicación de los recursos humanos, materiales y económicos de la Comisión, buscando que el beneficiario sea el sector forestal.
Quisiera llamar su atención al hecho de que enfrentamos condiciones climáticas adversas que representan un mayor reto para nuestra actividad, recordemos la situación de sequía que ha afectado algunas zonas del país y por supuesto ha alterado las condiciones ideales para realizar nuestras actividades.
De acuerdo con la información disponible y la proyectada del clima en lo que resta de 2009 y la primera mitad de 2010, hace prever condiciones muy difíciles para la reforestación y para la presencia de incendios forestales. Actualmente se tiene a nivel nacional el fenómeno de La Niña y se prevé para 2010 la presencia del fenómeno de El Niño.
Frente a esta situación, estamos tomando medidas determinantes y de especial cuidado en las condiciones que garanticen mejorar la supervivencia durante la reforestación.
A partir de 2009 y los años subsecuentes, el tema de combate de incendios forestales será concebido desde la visión de Manejo del Fuego, con lo cual se trabajará fuertemente en el desarrollo de acciones de prevención durante el último trimestre del año 2009 encaminadas a reducir las posibilidades de conflagraciones de gran magnitud en el 2010.
El cambio climático hoy en día es una preocupación del mundo globalizado ya que representa un peligro para los recursos naturales y para la vida misma. Sin embargo, este eminente riesgo también representa una oportunidad para todos nosotros, el Presidente Felipe Calderón, así lo ha expresado en diversos foros.
Aprovechar nuestros bosques sustentablemente, regenerarlos, evitar su destrucción, conservar nuestras selvas, debe ayudarnos, al mismo tiempo a superar problemas de marginación y de pobreza.
Amigos, queda mucho camino por andar, los invito pues, a que juntos hagamos los ajustes necesarios y trabajemos decididamente para que en pocos años podamos ver cambios sustanciales en este sector, que permitan por una parte, mejorar las condiciones de vida de los pobladores y dueños legítimos de los recursos forestales, y por otra, que haga más competitiva la actividad forestal a través de mejores prácticas de manejo, el reconocimiento pleno de los servicios ambientales y la recuperación de tantas y tantas zonas con diferentes grados de alteración.
También quiero expresar mi reconocimiento a los galardonados con el Premio Nacional al mérito forestal por su compromiso y ejemplo del manejo sustentable de nuestros recursos forestales,
Enhorabuena.
Dr. Juan Manuel Torres Rojo
Director General De la Comisión Nacional Forestal
